Hoy, el núcleo de la clase capitalista transnacional son las 164 personas en los directorios de las 13 corporaciones financieras más poderosas y centralizadas del mundo. Estas personas colectivamente manejan 23.91 trillones de dólares en fondos y operan en casi todos los países.
El desvelamiento de estos 164 poderosos individuos es el resultado de una reciente investigación de los profesores Peter Phillips y Brady Osborne de la Universidad de Somona California. Ambos consideran que el mundo debe conocer a los que legal o ilegalmente manipulan la economía global en su favor.
Los investigadores han confeccionado así un Apendix donde se identifica con nombre, nacionalidad, actividades financieras y títulos académicos, a estas 162 personas que constituyen “el núcleo de la clase capitalista global”.
73 de ellas son ciudadanos de los Estados Unidos, 27 de Gran Bretaña, 14 de Francia, 12 de Alemania, 11 de Suiza, 4 de Singapur, 3 de Austria, 3 de Bélgica, 3 de la India, 2 de Australia, 2 de Sudáfrica y 1 del Brasil, China, Colombia, Holanda, Kuwait, México, Qatar, Taiwán, Vietnam y Zambia, respectivamente.
En el Apendix hay tres latinoamericanos: el billonario mexicano Marco Antonio Slim, el financista brasileño Guillermo Linz, socio del grupo PE-JP Morgan, y el financista colombiano Martín E.Díaz, asociado al Grupo Credit Suisse.
Nunca hasta ahora se habían identificado a los miembros de los directorios de las corporaciones financieras más poderosas del mundo. Fue este anonimato lo que hizo que esta superclase capitalista estuviera oculta para los medios de prensa.
El estudio además señala a bancos transnacionales muy importantes como JP Morgan Chase, HSBC de facilitar el lavado de dinero producto del narcotráfico y al Barclays, y UBS de manipular fraudulentamente el Libor. Destacando, al decir esto, que no han sido perseguidos criminalmente por sus gobiernos porque, segun éstos, son bancos “to big to fail.” (muy grandes para permitir su colapso).
Intocable esta superclase financiera sigue así practicando operaciones, riesgosas especulativas, protegida por la inercia del G20 y del FMI.
Según el estudio este núcleo tiene consejeros que han servido en el FMI, el Banco Mundial, en los ministerios de Finanzas de la Unión Europea, en la Reserva Federal de los Estados Unidos, en el G8 y el G20. Además, ellos mismos son asesores de gobiernos, universidades y organizaciones internacionales.
Sin duda, esta superclase capitalista tiene lo que los analistas llaman: “afluenza”, que significa tener afluencia e influencia. Sin embargo, su poder ya no es anónimo porque, gracias a los profesores Phillips y Osborne, está expuesto en Internet: “https://www.globalresearch.ca/exposing-the-financial-core-of-the-transnational-capitalist-class/5349617”
Publicado con autorización del autor.
